HALLAZGO DE LOS SUSTENTOS
De nuevo los dioses dicen:
- ¿ Qué van a comer los hombres ? ¡Andan buscando alimentos !
Ya va a tomar la hormiga roja los granos de maíz al Monte de los sustentos. Se encontró con Quetzalcóatl y él dijo:
- ¿ En qué lugar fuiste a coger esos granos? ¡Dímelo por favor!
Ella no quería decirlo: porfió él en preguntarlo. Y por fin dijo ella:
- ¡ Allá en el Monte de los sustentos! Y la hormiga lo conduce allá,
Quetzalcóatl se trocó en hormiga negra. Lo va acompañando la
otra y entra al Monte de los sustentos.
Ya los dos juntos transportan y ponen a la orilla de la montaña los granos de maíz. Luego los llevan a Tamoanchan (tierra de la vida nueva).
Los mordisquearon los dioses. En nuestros labios los pusieron y con eso fuimos creciendo.
Dicen entonces (los dioses):
- ¿ Qué hacer con el Monte de los sustentos ?
Va Quetzalcóatl en seguida y hace intento de cargarlo.
Lo ató con cuerdas, pero no pudo levantarlo.
Con los granos de maíz echa suertes Oxomoco y su esposa Cipactónal empieza a leer los destinos.
Y los dos dijeron juntos:
- Lo ha de quebrantar el dios llagado (Nanáhuatl). Y ellos echaban sus suertes.
Pero llegaron todos los dioses de tierra y lluvia (Tlaloque):
Dioses azules, cual cielo; dioses blancos; dioses amarillos; dioses rojos. Hicieron un montón de tierra. Y se llevaron los dioses de la tierra y de la lluvia (Tlaloque), todos los sustentos: maíz blanco,
maíz amarillo, la caña de maíz verde; maíz negruzco, y el frijol, los bledos, la chía, la chicolata,...¡Todo lo que es sustento nuestro fue
arrebatado por los dioses de la lluvia!
- ¿ Qué van a comer los hombres ? ¡Andan buscando alimentos !
Ya va a tomar la hormiga roja los granos de maíz al Monte de los sustentos. Se encontró con Quetzalcóatl y él dijo:
- ¿ En qué lugar fuiste a coger esos granos? ¡Dímelo por favor!
Ella no quería decirlo: porfió él en preguntarlo. Y por fin dijo ella:
- ¡ Allá en el Monte de los sustentos! Y la hormiga lo conduce allá,
Quetzalcóatl se trocó en hormiga negra. Lo va acompañando la
otra y entra al Monte de los sustentos.
Ya los dos juntos transportan y ponen a la orilla de la montaña los granos de maíz. Luego los llevan a Tamoanchan (tierra de la vida nueva).
Los mordisquearon los dioses. En nuestros labios los pusieron y con eso fuimos creciendo.
Dicen entonces (los dioses):
- ¿ Qué hacer con el Monte de los sustentos ?
Va Quetzalcóatl en seguida y hace intento de cargarlo.
Lo ató con cuerdas, pero no pudo levantarlo.
Con los granos de maíz echa suertes Oxomoco y su esposa Cipactónal empieza a leer los destinos.
Y los dos dijeron juntos:
- Lo ha de quebrantar el dios llagado (Nanáhuatl). Y ellos echaban sus suertes.
Pero llegaron todos los dioses de tierra y lluvia (Tlaloque):
Dioses azules, cual cielo; dioses blancos; dioses amarillos; dioses rojos. Hicieron un montón de tierra. Y se llevaron los dioses de la tierra y de la lluvia (Tlaloque), todos los sustentos: maíz blanco,
maíz amarillo, la caña de maíz verde; maíz negruzco, y el frijol, los bledos, la chía, la chicolata,...¡Todo lo que es sustento nuestro fue
arrebatado por los dioses de la lluvia!
Ángel M. Garibay K. La literatura de los Aztecas.
Editorial Joaquín Mortiz, Quinta edición, México, 1964.
Editorial Joaquín Mortiz, Quinta edición, México, 1964.
No hay comentarios:
Publicar un comentario